Los grupos consolidados plantan cara a Hacienda y recurren las restricciones para compensar en el Impuesto de Sociedades las pérdidas obtenidas por sus filiales. Una sentencia contra de la Agencia Tributaria podría suponer un golpe para las arcas públicas de más de 3.000 millones de euros en devoluciones a las empresas. Es decir, unos 1.000 millones por cada año que la medida ha estado en vigor.

Los distintos fiscalistas consultados por elEconomista.es coinciden en que las compañías están recurriendo "mucho" los límites a compensar fiscalmente las pérdidas en base a que vulnera el principio constitucional de capacidad económica. Es decir, Hacienda está gravando una renta que no existe con el único objetivo de incrementar la recaudación.

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