A partir de 2035, los coches de combustión y diésel, incluso los híbridos, serán agua pasada. Esto es lo que ha aprobado el Parlamento Europeo esta semana. Y es que, a partir de ese momento, ya no se podrán vender automóviles de este tipo. Por tanto, desde ese año en adelante, todos los turismos y furgonetas nuevos que se comercialicen en la Unión Europea deberán ser "cero emisiones". Un hecho que lo que hará será poner más trabas a los desplazamientos de los ciudadanos con menor renta y los que vivan más lejos. A raíz de lo que a día de hoy se considera una utopía, en'Herrera en COPE' hemos hablado con Pedro Prieto, Vicepresente de la Asociación para el Estudio de los Recursos Energéticos (AEREN), que nos ha dado su opinión acerca de que esto se lleve a cabo.

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