Las ganancias de 2017 son casi treinta veces más que el resultado de 115 millones de dólares (93 millones de euros) correspondiente a 2016, como consecuencia de los mayores precios del petróleo y el menor importe de los pagos relacionados con el desastre del Golfo de México.

En concreto, durante el ejercicio 2017 la petrolera británica efectuó el pago de 5.200 millones de dólares (4.190 millones de euros) en relación con el desastre del Golfo de México, frente a los 6.900 millones de dólares (5.560 millones de euros) de 2016.

En el conjunto del ejercicio, el beneficio subyacente teniendo en cuenta costes de reposición de BP alcanzó los 6.166 millones de dólares (4.971 millones de euros), un 138% más.

Por su parte, los ingresos totales de la petrolera entre enero y diciembre aumentaron un 31%, hasta 244.582 millones de dólares (197.147 millones de euros), incluyendo ventas por importe de 240.208 millones de dólares (193.621 millones de euros), un 31,2% más.

En el cuarto trimestre, el beneficio neto atribuido de BP cayó un 94,5%, hasta 27 millones de dólares (22 millones de euros), después de contabilizar un impacto negativo de 900 millones de dólares (725 millones de euros) por la implementación de la reforma fiscal de EEUU, así como un cargo de 1.700 millones de dólares (1.370 millones de euros) por las provisiones relaciones con el derrame de petróleo en el Golfo de México.

Por su parte, el beneficio subyacente teniendo en cuenta costes de reposición de BP en el cuarto trimestre alcanzó los 2.107 millones de dólares (1.699 millones de euros), cinco veces más que un año antes.

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